Es importante comer de una
manera sana y vivir saludable para protegerse de enfermedades, pero en la
edad infantil es cuando debe estimularse esos buenos hábitos alimenticios con
mayor intensidad, así conforme el niño crezca mejore su calidad de vida.
Los niños con una buena nutri ción
son menos propensos a obtener enfermedades como: obesidad, diabetes, enfermedades
cardiovasculares, hipertensión arterial, osteoporosis, cáncer y anemia.
Para comer sano yo recomiendo:
- Enseñarle a comer de todo para que no tenga problemas con ningún alimento sano.
- Iniciar el hábito de un desayuno completo y saludable.
- Tener un horario regular para los diferentes tiempos de comida.
- Distribuya los nutrientes esenciales para los niños en los diferentes tiempos alimenticios.
- Mantenga buenos hábitos higiénicos con los alimentos que consume usted y sus niños.
- Aumente en los niños el nivel de responsabilidad alimenticia.
- Prefiera los alimentos preparados en casa.
- Involúcrelos en la preparación de los alimentos.
- Acompañe al niño en el momento de comer.
- Prepare los platos de forma atractiva para que el niño disfrute lo que come.
- Modere el tamaño de las porciones ingeridas.
- Enséñele que bebe masticar bien los alimentos.
- Evite darle carnes procesadas, embutidos y frituras por su contenido alto en grasa.
- Trate de que el niño consuma mínimo 2 porciones de fruta.
- Agregue legumbres, cereales integrales, semillas y frutas secas en el almuerzo y cena.
- Limite el consumo de azúcar y el abuso de dulces.
- Reemplace la sal por perejil, albahaca, tomillo y romero.
- Adhiera a las ensaladas limón y aceite de oliva.
- Prepare batidos de frutas naturales con poca azúcar.
- Elimine la grasa visible en las carnes.
- Cuando el niño consuma verduras no permita que les agregue sal y tampoco si consume frutas que les agregue azúcar.
- Si el niño se siente satisfecho con lo que ya comió trate de no agregarle más alimentos para que evite el exceso y no caiga en sobrepeso.
- Ínstarlo a tomar bastante agua durante el día y asegúrese de que sea potable.
Además de tener una buena alimentación también es importante que los niños
hagan actividad física, que sean lo menos sedentarios y lo más activos posibles
para que mejoren su metabolismo y su salud en general.